Locomotoras que tiran del mundo.
La Fundación Eduarda Justo dio un “cañonazo de ambición” a los participantes en el XIII Seminario Líderes del Futuro, realizado este año de forma online.
Seminario Líderes del Futuro con jóvenes de alto potencial. Jóvenes como pueden ser los que han participado en el XIII Seminario Líderes del Futuro, una iniciativa organizada por la Fundación Eduarda Justo, con la que se aspira a dar el empujón que necesitan personas con un elevado potencial para emprender grandes proyectos que pueden cambiar el mundo.
Este seminario, impulsado por la fundación perteneciente al Grupo Cosentino, nació hace trece años con el objetivo de “cambiarle la vida” a las personas que cada edición han tenido la oportunidad de conocer la experiencia de emprendedores en los ámbitos de la empresa, lo social y el deporte.
“Queremos que hagáis cosas grandes”, dijo en la presentación del Seminario el director de la Fundación Eduarda Justo, Juan Martínez Barea, que también pronunció las frases que abren esta crónica. En el Seminario se ofreció una visión optimista del mundo, alejada de la forma tan española de entender la realidad que, en muchos casos, lleva a no ser capaz de ver las posibilidades de cada uno.
Y el trabajo de algunas personas que, con su determinación y esfuerzo, han sido capaces de encontrar soluciones a grandes problemas del mundo actual. Personas que, como dijo Juan Martínez Barea, se convierten en las “locomotoras” que tiran de la sociedad, para buscar soluciones a los grandes retos. Por eso, en este Seminario se trató de despertar y ver las oportunidades que hay en el mundo. Se convirtió en “un cañonazo de ambición” y en un espacio para “encender la chispa para querer cambiar el mundo”.
Tecnología como motor de cambios
La tecnología puede ser la gran aliada, se remarcó, pero solo con ella no es suficiente. Se necesita dejar de lado a ese “Sancho Panza” que imponen la sociedad y el día a día, para empezar a creer al “Quijote” que todo el mundo lleva dentro y asumir proyectos ilusionantes, dar pasos imprevistos, virar el rumbo de una vida marcada de antemano, apoderarse, en definitiva, del destino.
Para ello, el Seminario de Líderes del Futuro ha contado con unos ponentes de un gran nivel. Personas como Ignacio Dean, que contó lo que le llevó a dar la vuelta al mundo caminando, un proyecto que duró tres años, y a unir los cinco continentes a nado. Ahora está embarcado en otra aventura, que le está llevando a realizar un ruta de más de 1.600 kilómetros en bicicleta, en conmemoración del quinto centenario de la vuelta al mundo de Magallanes-Elcano.
Antonio Espinosa de los Monteros, un joven arquitecto que, tras un proyecto de cooperación en África se dio cuenta de que la mayor pobreza es no tener acceso a agua potable. Por eso creó Auara, una empresa social que vende de agua embotellada, cuyos beneficios van íntegramente a proyectos para facilitar el acceso al agua potable en entornos desfavorecidos de todo el mundo.
Jóvenes como David Caballero, un biotecnólogo que dejó un puesto de gran responsabilidad y muy bien pagado en un farmacéutica, para embarcarse en un proyecto que promueve cambiar el mundo a través de la educación. Azahara García Espejo, becaria de postgrado de la Fundación Eduarda Justo y que ahora trabaja en la aceleración de startups.
Tuvieron delante a Miguel Milano, uno de los empresarios más importantes de este país, presidente de firmas tan importantes como Oracle, Salesforce y que ahora está al frente de Celonis. Héctor García, geógrafo que creó una empresa tecnológica de geolocalización y ha impulsado varios proyectos de compromiso social. Mar Cabra, ganadora del Premio Pulitzer de Investigación, por su trabajo en el análisis de los conocidos como ‘papeles de Panamá’ y que ahora trabaja contra la dependencia que genera la tecnología.
Cosentino: caerse para volver a levantarse. Francisco Martínez-Cosentino, presidente del grupo Cosentino, quien confía plenamente en la juventud y que contó cómo de una pequeña cantera nació la multinacional que ahora encabeza.
El Seminario Líderes del Futuro de 2020 ha sido diferente, porque en vez de desarrollarse, como es habitual, en el salón de actos de la central de Cosentino, en Cantoria (Almería), se desarrolló, del 17 al 18 de septiembre, a través de Youtube, debido a la situación de pandemia. Sin embargo, lo que podría parecer un problema se transformó en una ventaja, ya que el formato on line permitó ampliar el número de asistentes a las charlas impartidas por ponentes de un gran nivel. Por primera vez, Líderes del Futuro se abrió a estudiantes y profesorado de Bachillerato, y alumnos del Máster de Liderazgo de la Fundación Rafael del Pino. Y, por supuesto, a jóvenes universitarios y egresados con alto potencial para ser los líderes que cambien el mundo.
En total, más de 250 personas siguieron en directo un seminario en el que se pusieron sobre la mesa valores como los que han hecho grande a la empresa Cosentino: esfuerzo, perseverancia, humildad, pasión, ambición y visión global.
Jóvenes a los que seguramente su paso por el Seminario les cambie la vida y que aprendieron que para hacer grandes cosas solamente se necesitan determinación y esfuerzo.
Puede ver el reportaje completo en la revista Novaciencia: Enlace